El rock no ha muerto

Notas Acusmáticas

Hace poco leí en algún lado, palabras más o menos: “el rock está muerto, porque sus bases y los que las defendíamos ya somos muy pocos”. No estoy de acuerdo. Pero para justificar mi opinión tendríamos que definir antes un par de conceptos.

Primero, ¿qué es el rock? Si bien existen interminables debates sobre el tema, podemos centrarnos en que se trata de un derivado del rock and roll, nacido en el siglo XX en Estados Unidos, en época de guerra. El rock and roll como tal es la evolución del rythm and blues que data desde los años 20. Dicha evolución llega a un punto culminante con Elvis Presley quien, según la revista Rolling Stone, grabaría la primera canción considerada en el género del rock and roll: “That’s all right mama” en 1954.

Posteriormente surgen grupos como The Beatles y los Rolling Stones con quienes empieza la evolución hacia el género que hoy conocemos meramente como “rock”, identificado con los grupos que utilizan una base musical conformada por voz, batería, bajo, guitarra(s) con distorsión y piano o teclados. Esto permitió el nacimiento de muchos otros géneros como el hard-rock, el rock alternativo, el metal, el rock psicodélico, el rock progresivo, el punk-rock, el grunge y el pop, con un infinito etcétera en dicha evolución natural de la música.

En gustos se rompen géneros, reza el dicho popular, y para muestra se entienden las múltiples fusiones del rock en la actualidad: desde los pioneros con el folk-rock y jazz-rock, pasando por el rock alternativo, hasta nuestros días con el synth-rock, post-rock, punk-rock y pop-rock, entre muchos más.

Dicho esto, podemos tener una concepción más clara de lo que en definitiva no es el rock. Géneros como la cumbia, el reggaetón, la salsa, la banda y similares, no tienen nada que ver con el rock. Es más, bajo esta perspectiva, me parecería ilógico clavarse en una clasificación estricta para los grupos musicales y propondría más bien una tipificación por canciones.

¿Quién podría negar que Caifanes es una banda de rock? ¿Pero qué me dicen de “La Negra Tomasa”?, ¿ya no es una banda de rock porque quisieron hacer un cover de cumbia? Definitivamente, esa canción es cumbia pero la mayor parte de las canciones de Caifanes, si no es que todas, se identifican con el género rock. ¿Vamos de acuerdo?

Segundo, ¿cuáles son las bases del rock? Hay que aclarar que, al evolucionar del rock and roll que se cimentaba en el rythm and blues con una ideología inmersa en la lucha racial y de clases, se transforma en un fenómeno cultural que se rige bajos los principios de libertad y de cultura contestataria ante la opresión y las injusticias.

Lo anterior es un punto básico para identificar la música rock. Durante décadas, principalmente en los 60 y 70, los rockeros de la época se posicionaron como los principales líderes que influían para protestar por la guerra de Vietnam, por los derechos de las minorías y por los errores de los malos gobernantes. Este género musical fue identificado como un signo de rebeldía juvenil y de ahí que se cayera en los famosos excesos del rock, como una forma de continuar en esa línea de desobediencia civil.

Hasta nuestros días, los grupos de rock son líderes en la conformación de la opinión pública, ya que, como he mencionado anteriormente en este espacio, los artistas somos ejemplo a seguir y evidentemente influimos en las opiniones y modo de actuar de nuestros seguidores.

El verdadero rock se preocupa por hacer conciencia en sus admiradores, no solamente en la juventud que se impresiona con su música, de la época que sea, sino también en aquellos que continúan escuchando esa música que los cambió en sus años mozos y que en su edad avanzada la siguen disfrutando, difundiendo y tomando como fuente de inspiración en su vida diaria.

Habiendo definido los conceptos anteriores, puedo afirmar sin ningún temor que el rock en esta época está más que vivo. Toma la fusión que quieras, no importa cómo le llames, pero el rock sigue reinventándose y con bases fuertes.

En la actualidad, existen rockeros que se han convertido en grupos de “culto” y que no solamente intentan hacer un cambio a través de sus letras, sino también a través de su opinión sobre la política ante los medios de comunicación. En varias columnas pasadas también he hablado sobre el tema.

En conclusión, la esencia del rock no radica en echarse a perder la vida en el alcohol y drogas, sino en servir como un contrapeso social ante las iniquidades, con la sinceridad con la que es expresada su música. Mientras se respete la base o estructura musical que conforma el rock, todas sus variantes siempre serán bienvenidas. El rock vive a través de sus emblemáticas guitarras con distorsión. Y mientras existan bandas consolidadas y emergentes que valientemente externan su legítima opinión, ya sea a través de su música o ante la sociedad, con un trasfondo político, cultural y artístico, así seamos pocos o muchos, entonces el rock seguirá viviendo.